Nueva generación de parques industriales

De manera constante, a nivel mundial se han estado presentando situaciones adversas, como la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la negociación del T-MEC, las presiones migratorias, la inseguridad y el Covid-19, lo cual ha generado incertidumbre en los mercados; no obstante, los parques industriales en el mundo se están renovando para mantener una sólida oferta que pueda satisfacer la demanda.

Claudia Ávila Connelly, directora general de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP) afirma que dicho dinamismo se debe a que la Inversión Extranjera Directa (IED) continúa llegando a México, debido a factores como el crecimiento de la economía de Estados Unidos, que aún estando por debajo de lo planeado, al final de 2019 registró un crecimiento superior al 2%; y a la confianza del consumidor en ese país que registra índices altos hasta febrero de 2020.

La ocupación de una zona industrial está estrechamente ligada a los flujos de IED de los sectores de manufactura y logística, porque continúa siendo una región atractiva para las empresas globales por su posición geográfica privilegiada y vocación manufacturera, lo que le permite integrarse a las cadenas productivas de América del Norte. Además, en México existe disponibilidad de talento humano, infraestructura, conectividad, costos competitivos, estabilidad macroeconómica y un amplio mercado doméstico.

Tendencias que impulsan cambios en un parque industrial

Más allá de las situaciones actuales, existen tendencias a largo plazo que están fomentando cambios de fondo en el mercado inmobiliario industrial, entre las cuales destacan:

-El cambio climático: Este factor impulsa a las empresas a instalarse en espacios que permitan el ahorro de energía, el uso de energías renovables y la reutilización del agua, así como el manejo responsable de residuos, para que en un siguiente nivel, la demanda se incline hacia la economía circular, en donde a partir del establecimiento de sistemas que faciliten el uso de residuos para la fabricación de productos o servicios.

-La Agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU): Esta agenda plantea los objetivos de Desarrollo Sustentable, para generar conciencia en las empresas sobre poner en práctica estándares Medioambientales, Sociales y de Gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés), con el fin de mitigar el impacto en el medio ambiente y promover el respeto a los derechos humanos y desarrollo comunitario.

-La disrupción tecnológica: Esta situación rompe los modelos comerciales tradicionales y las cadenas de valor, en donde se incluye el sector inmobiliario. El comercio electrónico provoca un menor consumo en las tiendas físicas, lo que influye en el cierre de cadenas minoristas. Esto, a su vez, detona una mayor demanda de edificios industriales destinados a distribución y almacenaje con una ubicación dentro de zonas urbanas, para atender el e-commerce.

Por otra parte, el auge de los robots en sustitución de la fuerza laboral implicará un impacto importante en el tamaño y escala de las instalaciones industriales. De igual forma, las Tecnologías de la Información (TIs) generan un cambio de lo físico a lo digital en diversas actividades productivas.

-El factor humano: En la actualidad, los trabajadores demandan espacios con amenidades para mejorar su experiencia en el ambiente laboral, ya que más allá de los salarios, las personas buscan condiciones que les permitan una mejor calidad de vida durante su jornada, como áreas verdes y recreativas, guarderías, centros de capacitación, centros básicos de salud y primeros auxilios, centros de consumo, cajeros automáticos, ciclo pistas, transporte público, entre otros, que se convierten en los nuevos requerimientos de los clientes de una zona industrial para disminuir los riegos de rotación de personal e incrementar la productividad.

Todas estas tendencias están creando oportunidades para que un parque industrial sea inteligente, ecológico y amigable con las comunidades. Además, los inversionistas institucionales se están inclinando hacia empresas que invierten en tecnologías para los edificios del futuro.

Estas fuerzas disruptivas representan un gran desafío para los desarrolladores inmobiliarios industriales, por lo que es necesario planear a futuro y dar prioridad a las necesidades de los usuarios, es decir, no será suficiente pensar solamente en infraestructura, rentas y financiamiento sino también en adoptar una actitud proactiva para atender las nuevas demandas del mercado.

Mapa de ruta hacia el 2030

Ante las tendencias mencionadas, recientemente la AMPIP presentó su Mapa de ruta para la nueva generación de parques industriales inteligentes y sustentables hacia el 2030, en donde se dan a conocer las diversas situaciones que se tendrán que superar y los pasos estratégicos para cumplir con los objetivos marcados.

De acuerdo con Claudia Esteves, colaboradora externa de la AMPIP, durante las cuatro décadas pasadas, los parques industriales han sido polos de atracción de las inversiones de grandes empresas nacionales y extranjeras que forman parte de los principales sectores productivos del país como el automotriz, aeroespacial, eléctrico, electrónico, alta tecnología, retail, comercio exterior y logístico.

Este documento consiste en un análisis de las capacidades actuales de los parques industriales, un diagnóstico elaborado con la metodología FODA (fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas) y finalmente, se dan a conocer las tendencias actuales.

Oradel como parte de una nueva generación de parques industriales

Desde su creación en el año 2000, Oradel Industrial Center ha estado comprometido con la sustentabilidad, el medio ambiente y con las empresas que han instalado sus operaciones en este parque industrial.

Oradel ha puesto especial atención en contar con infraestructura y un terreno amplio que permite la construcción de edificios y naves industriales de acuerdo a las necesidades de cada cliente.

Además, ofrece diversas ventajas dentro del parque para todos los trabajadores de las empresas, como 5 mil viviendas para ellos y sus familiares, guardería, escuela pública, la Universidad Tecnológica de Nuevo Laredo, seguridad y servicios.