La transformación digital de la industria automotriz

Para este año, las grandes empresas de la industria automotriz están planteando y aplicando nuevamente sus proyectos de transformación digital, gracias a que se está contando con los recursos necesarios para realizar este proceso. Con ello, se espera una recuperación inminente de la industria, la cual está adquiriendo las herramientas tecnológicas necesarias para dar abasto a los objetivos empresariales.

De acuerdo con Jorge Bleizeffer, Gerente Comercial para la región Norte, Bajío y Pacífico de México de Panduit, en este año se ha comenzado a retomar la manufactura de soluciones para la Industria 4.0, la cual comienza a registrar los niveles que se alcanzaron en 2019.

Después del primer año de la pandemia por el Covid-19, las empresas de distintos sectores optaron por mejorar ciertos espacios de convivencia y operaciones para así mantener o aumentar su producción reduciendo el uso de recursos. Tras esto, la preveía que existiría un porcentaje muy alto en el desarrollo de la digitalización de edificios, oficinas, telecomunicaciones, centros de distribución para la industria manufacturera al finalizar la pandemia; sin embargo, diversos sectores como el automotriz se han visto rebasados por dificultades que les han obligado a detener sus proyectos de transformación digital. 

Entre las situaciones que han afectado al sector se encuentran la escasez de semiconductores que persiste desde hace dos años y genera un descontrol en la manufactura de vehículos. Por lo que los automóviles pasan por un proceso de construcción incompleto en el que se concluye una gran parte del vehículo a excepción de ciertos componentes tecnológicos que son agregados en un segundo proceso operativo generando un mayor costo en el proceso de ensamblado. 

Otro de los inconvenientes a los que se enfrenta la industria automotriz es la cantidad de incidentes logísticos derivados de situaciones como la falta de contenedores, materias primas y los tiempos de entrega variables. 

Considerando lo anterior, se ha generado incertidumbre para las empresas manufactureras y los centros de distribución nacionales e internacionales, quienes han implementado una serie de medidas para reducir los tiempos de entrega y contar con los vehículos  necesarios para satisfacer las necesidades de sus clientes.

De esta forma, han surgido nuevos almacenes en las zonas en la que se requiere de ciertos productos, además, se han ampliado los inventarios para tener un mayor número de vehículos disponibles en un menor tiempo y evitar la incertidumbre logística.

Aun con lo antes descrito, en este año, las empresas de la industria automotriz han retomado la manufactura de soluciones para la Industria 4.0., con lo cual se reanuda la aplicación de nuevas tecnologías que permiten desarrollar energías limpias, ya que plantean cambios en las líneas de producción para generar autos eléctricos y plantas de manufactura, almacenes y centros de distribución nuevos que reduzcan considerablemente la huella de carbono. 

Además, las grandes empresas automovilísticas están planteando y aplicando nuevamente sus proyectos de transformación digital, gracias a que se está contando con los recursos necesarios para realizar este proceso. Con lo anterior, se espera una recuperación de la industria, la cual está adquiriendo las herramientas tecnológicas necesarias para dar abasto a los objetivos empresariales.

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