México y Estados Unidos cooperarán en la producción de semiconductores y autos eléctricos

La escasez de semiconductores a nivel mundial, generada por los efectos causados por la pandemia por el Covid-19 afectó a la industria de automóviles, electrodomésticos y otros bienes, repercutiendo en la inflación. Por lo que México y Estados Unidos buscan aprovechar la inversión estadounidense en la manufactura de chips para impulsar la integración de sus cadenas de suministro y la producción de vehículos eléctricos a través de la industria mexicana del litio.

La creación de esta nueva sociedad entre México y Estados Unidos para fabricar en conjunto semiconductores se basan en iniciativas de ambas naciones, las cuales tienen como fin trasladar y ampliar la producción de semiconductores y de las baterías necesarias para los vehículos eléctricos de Asia a Norteamérica

De acuerdo con Antony Blinken, Secretario de Estado estadounidense, en la actualidad, algunos elementos fundamentales de las cadenas de suministro de semiconductores ya están bien establecidos en México, con compañías estadounidenses como Intel y Skyworks que realizan investigación y desarrollo, diseño, ensamblaje y manufactura de prueba.

Por lo tanto, Estados Unidos busca que México aproveche las oportunidades que trae consigo la Ley de Chips y Ciencia, aprobada recientemente por su Congreso, la cual tiene como objetivo impulsar el cambio a vehículos eléctricos y la producción local de las baterías que se requieren, por lo que proporcionará 28 mil millones de dólares en incentivos para la producción de semiconductores, 10 mil millones de dólares para nueva manufactura de chips y 11 mil millones para investigación y desarrollo.   

Por su parte, México se encuentra desarrollando un plan para impulsar la producción de litio y automóviles eléctricos, ya que el litio es un componente básico de las baterías para los vehículos eléctricos.  

Por lo tanto, se busca que en el futuro, todos los equipos electrónicos que se produzcan en América del Norte, como televisores, computadoras, tabletas, impresoras, celulares y autos eléctricos contengan chips manufacturados en México o Estados Unidos.

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